El entorno empresarial cambia y se adapta a estas transformaciones y es fundamental para mantener el éxito a largo plazo. Una estrategia efectiva para mantener la relevancia y atraer a nuevos clientes es a través del rebranding. Pero ¿qué implica el rebranding y cómo puedes llevarlo a cabo con éxito en tu empresa?
En esta ocasión, nos adentramos en el apasionante mundo del rebranding, para explorar los conceptos fundamentales y desglosar los pasos clave para su implementación exitosa en tu empresa. Si alguna vez te has preguntado cómo revitalizar tu marca, ¡has llegado al lugar indicado!
¿Qué es con exactitud el rebranding?
Antes de sumergirnos en los detalles de "cómo llevar a cabo un rebranding", es importante comprender qué significa este término tan de moda.
Básicamente, el rebranding es una estrategia empresarial que consiste en renovar y transformar la identidad de una marca.
Sin embargo, este proceso no se limita solo a cambiar un logotipo; implica una revisión exhaustiva de la misión, la visión y los valores de una empresa, con el objetivo principal de mantenerse relevante en un mundo en constante evolución.
El paso a paso para un rebranding exitoso
Sigue estos 7 pasos para implementar con éxito tu estrategia de rebranding:
1. Evalúa la situación actual de tu marca: antes de tomar decisiones, realiza un análisis exhaustivo de tu marca. ¿Cuáles son tus fortalezas y debilidades? ¿Qué piensan tus clientes actuales y potenciales? Este análisis te proporcionará orientación y te ayudará a identificar áreas de mejora.
2. Define y establece objetivos claros: precisa qué deseas lograr con el rebranding y establece metas concretas. ¿Buscas atraer a un nuevo público objetivo? ¿Incrementar la visibilidad de la marca? Sea cual sea tu objetivo, tenlo claro desde el principio.
3. Trabajo en equipo: el rebranding no es solo responsabilidad del departamento de marketing. Involucra a todo tu equipo para asegurar una transición coherente en todos los aspectos de la empresa. La diversidad de perspectivas puede generar ideas innovadoras. Además, asegúrate de que todos estén alineados con la nueva visión de la marca.
4. Redefine la misión, la visión y los valores de tu empresa: evalúa la misión, la visión y los valores de tu empresa para un rebranding efectivo. ¿Qué y cómo lo haces? Éstas son preguntas clave para determinar en dónde se necesita un cambio. Asegúrate de que la forma en que se comunican estos aspectos coincida con el nuevo mensaje de tu marca si han cambiado durante el rebranding.
5. Considera un cambio de nombre con cuidado: si tu rebranding implica un cambio de nombre, ten un plan de contingencia en caso de crisis reputacional. Si tu nombre actual aún refleja los valores de tu empresa, considera mantenerlo. Si decides cambiarlo, asegúrate de que esté alineado con la misión, la visión y los valores de la empresa para respaldar el crecimiento a largo plazo.
6. Desarrollo de la nueva identidad visual corporativa: actualiza los elementos visuales para reflejar la nueva dirección de tu empresa. Asegúrate de que la nueva identidad sea coherente con los valores y los objetivos establecidos. Elabora nuevas directrices que reflejen los aspectos visuales de la marca, como el logotipo, la paleta de colores y el diseño web, para garantizar una implementación correcta en todos los materiales de marketing.
7. Comunicación efectiva: informa a tus clientes, empleados y partes interesadas sobre el cambio de tu marca. Utiliza todos los canales disponibles, desde redes sociales hasta comunicados de prensa, para transmitir el cambio y explicar sus razones.
¿Cuándo deberías hacer un rebranding?
1. Si tu empresa experimenta un declive
Cuando hablamos de rebranding, lo describimos como un proceso de transformación. Por lo tanto, es esencial comprender cuándo aplicarlo. Este proceso está ligado al ciclo de vida de una marca.
Desde el nacimiento de una empresa hasta su crecimiento y madurez, su trayectoria puede ser representada por etapas. Sin embargo, cuando la línea que simboliza esta evolución comienza a declinar, es señal de posibles dificultades por delante. Es en este momento cuando las estrategias de rebranding entran en acción para evitar el peligroso descenso hacia lo que se conoce como el "Valle de la muerte".
Una empresa que ya ha alcanzado la madurez y empieza a experimentar un declive tiene la oportunidad de revitalizarse a través de un proceso de rebranding.
2. Cuando la visión central del negocio ha evolucionado
Es posible que tu marca ya haya alcanzado cierto posicionamiento, así que puedes renovarla acorde a las tendencias emergentes o las nuevas proyecciones dentro de tu sector. En este caso, es crucial realizar estudios exhaustivos sobre el reposicionamiento de tu negocio, al considerar aspectos como tu audiencia objetivo, productos, precios y estrategias de promoción.
3. Si nuestros consumidores ya no se sienten conectados con la marca
Los tiempos cambian y las preferencias de los consumidores también. Si notas que tus clientes ya no muestran el mismo interés que antes, considera si un rebranding sería apropiado. Sin embargo, es importante evitar una competencia desesperada por la atención, ya que la relevancia para tu público objetivo es más valiosa que la mera notoriedad.
4. Cuando la empresa busca expandirse más allá de sus fronteras geográficas
¿Está tu marca preparada para expandirse? Es probable que necesites ajustar ciertos aspectos para llegar a nuevos mercados. Esto puede implicar una adaptación parcial de tu imagen o productos, aunque en algunos casos, puede ser necesario un cambio más radical en la marca.
5. Si la imagen de marca se asemeja demasiado a otra
Si surge algún problema legal relacionado con tu identidad corporativa o algún aspecto central de tu marca, puede ser necesario realizar cambios significativos. En este caso, es esencial encontrar una nueva identidad que evite cualquier conflicto legal, incluso al considerar el uso de una nueva paleta de colores si es necesario.
Es fundamental entender que el rebranding no es solo una respuesta a la crisis o un deseo de cambio. Tu marca es uno de tus activos más valiosos, por lo que cualquier proceso de rebranding debe tener claros objetivos y ser ejecutado con cuidado y consideración.
Elementos que debemos tomar en cuenta antes de hacer un rebranding
Mediante una estrategia de rebranding, una empresa tiene la capacidad de redefinir y transformar su identidad de marca, al trascender más allá de simples cambios visuales como los logotipos y los colores. Este proceso implica una revisión profunda de la percepción que la marca tiene en el mercado y entre sus partes interesadas.
La alineación de la identidad de la marca con los valores actuales, los objetivos y la evolución del entorno comercial asegura su relevancia y conexión con la audiencia deseada.
Para implementar una estrategia de este tipo, se requiere una planificación cuidadosa y la consideración de diversos elementos, entre ellos:
• Análisis actual de la marca: es crucial identificar el estado actual de la marca y la percepción que se tiene de ella, así como evaluar el nombre de la empresa para asegurar su idoneidad en el sector.
• Investigación de la competencia: entender las tendencias, expectativas del cliente y oportunidades para destacar frente a la competencia es esencial.
• Objetivos claros: establecer con claridad qué se busca con la estrategia, ya sea rediseñar el sitio web, atraer a una nueva audiencia, corregir percepciones negativas o lanzar nuevos productos.
• Reevaluación de mensajes: examinar y ajustar los mensajes clave que se desean comunicar, asegurándose de que estén alineados con los valores fundamentales de la empresa.
• Desarrollo de identidad visual: repensar la identidad visual de la marca, esto incluye el logotipo, colores, tipografía y toda la imagen de marca.
• Evaluación continua: establecer métricas de éxito y evaluar el impacto del proceso, al ajustar una estrategia acorde con los resultados y la retroalimentación obtenida.
Llevar a cabo un rebranding exitoso implica una cuidadosa planificación y ejecución. Más que simplemente cambiar un logotipo, el rebranding representa una evolución estratégica para adaptarse a los cambios del mercado, revitalizar la imagen de tu marca y situarte en la cima.
Esta iniciativa brinda la oportunidad de reinventar y resaltar la identidad única de tu empresa. Si has considerado realizar un cambio en la imagen de tu marca, no dudes en ponerte en contacto con nosotros a través de nuestro formulario de contacto.
Recuerda, en el mundo empresarial, el cambio es una constante inevitable. ¿Estás preparado para enfrentar este desafío?