En el mundo de las redes, los tipos de canales sociales se pueden ordenar o explicar en diferentes grupos según sus funcionalidades, necesidades u objetivos.
El éxito de una estrategia de redes sociales se logra cuando se construye un ecosistema virtuoso en el que los canales de comunicación se alimentan entre sí y automáticamente se genera un crecimiento mediante el redireccionamiento de tráfico y contenido.
Hoy, te traemos una explicación de una de las divisiones más útiles que encontramos para ordenar lo que queremos publicar: las redes sociales vs. las redes documentales.
El gran paradigma de esta división es el protagonismo del contenido en la red. Mientras un tipo de red se enfoca en la propia pieza de contenido, en otras, el foco está en la interacción que sucede alrededor de ese contenido.
Así enfocamos cada grupo:
Redes de interacción
Estas son las tradicionales como Facebook, Instagram, Twitter o LinkedIn. Aunque efectivamente se parte de compartir contenido… ¿Cuál es la utilidad del contenido en la plataforma si nadie lo mira o interactúa con el mismo? Muy poca. Estas redes, por naturaleza, necesitan de interacción -pasiva y/o activa- para ser útiles.
Redes documentales
YouTube, Flickr, Pinterest… ¿qué tienen en común? Que si, hay comentarios e interacciones, pero lo que importa es la foto. YouTube, por ejemplo, puede ser un canal en donde no permitas comentarios, sino que solo subas tus videos en listas de reproducción para alimentar tu página web y disminuir los tiempos de descarga. YouTube puede funcionar como una ventana audiovisual y no necesitas de un community management intensivo que esté manejando la red todo el tiempo. En estas redes, el contenido es el foco.