El sueño emprendedor en la era digital y las redes sociales es monetizar tu ecosistema. Es decir, poner tus redes a producir ingresos automáticamente. Este fenómeno cambia constantemente y lo que comenzó como publicidad tradicional en formatos de redes sociales evolucionó a Superfollows, suscripciones o e-commerce.
Monetizar suena más fácil de lo que realmente es. Entre otras cosas, se necesita disciplina, contenido, frecuencia y flexibilidad para adaptarse a las oportunidades que aparecen.
Ahora, ¿cuáles son las estrategias generales a seguir si quiero monetizar mis redes? ¿Cuáles son mis opciones? Hoy traemos cuatro modelos de monetización para enfocar una estrategia en tu ecosistema digital:
Publicidad directa
Mucho ha cambiado, pero hay cosas que no, como la habilidad de aprovechar los espacios de atención para ofrecerte un producto. La publicidad directa se ha vuelto más quirúrgica, por lo que las marcas saben encontrar los espacios que van más acorde con su comprador ideal. En ese contexto, al definir tus contenidos también puedes pensar en qué tipos de productos se venderían mejor en la audiencia que consume tu contenido.
Publicidad indirecta
Entre los streamers se está popularizando esta técnica de publicidad menos invasiva, que en su momento Hollywood, y el entretenimiento en general, explotó muy elegantemente. Se trata de que tu contenido soporte el desarrollo de la actividad que consumes. Una maestra de yoga con una camisa Nike, o un streamer de videojuegos usando unos audífonos Bose. Tan simple como eso.
Freemium
Patreon, Onlyfans e incluso YouTube se han erigido sobre este modelo. Se trata de ofrecer parte de tu contenido gratuito, pero que invite a consumir contenido mejor elaborado o más personalizado por un costo adicional.
E-commerce
La última opción de esta lista necesita que tengas una marca posicionada y la capacidad de desarrollo de productos o servicios “on demand”. Tan sencillo como poner una tienda virtual en tu página web para que la gente pueda comprar tus productos.