El bienestar físico y mental es un tema del que mientras más información tengamos, mucho mejor. El balance de una vida saludable pasa por dedicar parte del día a hacer ejercicio, aunque las demandas de nuestro día a día, no permitan muchas veces que podamos hacerlo.
Muchas personas piensan que, si no tienen una o más horas diarias para el ejercicio, ya no vale la pena hacer nada. La frustración de no poder seguir un régimen de entrenamiento ejemplar termina por hacer que personas no dediquen ni 1 minuto en ello, sin entender que lo perfecto es enemigo de lo bueno.
Por ello, hoy queremos responder con ustedes la siguiente pregunta: ¿qué tanto me puede beneficiar 15 o 30 minutos de ejercicio al día?
Estudios científicos han demostrado que 30 minutos al día de ejercicio son suficientes para mantener al corazón saludable. Al ayudar con indicadores como la presión sanguínea o los niveles de colesterol, hacer una mínima cantidad de ejercicio mantiene tu corazón más sano.
En línea con el punto anterior, hacer ejercicio reduce una serie de indicadores inflamatorios que están ligados a varias enfermedades. El ejercicio tiene un impacto integral en varios órganos y sistemas del cuerpo, por lo que es una de las pocas acciones que puede ayudarte en general para tu vida.
Aunque se sabía que en general las personas que hacían ejercicio vivían más tiempo, ahora se entiende un poco mejor que también desacelera el envejecimiento. Estudios han confirmado que las personas que se ejercitaban regularmente, en contraste con las sedentarias, presentaban datos que confirmaban que su cuerpo era más “joven” que sus contemporáneos.
Además de sus beneficios para combatir y prevenir la depresión mediante la liberación de serotonina, el ejercicio disminuye los riesgos de demencia y además genera nuevas células cerebrales.