El sector farmacéutico en México es uno de los más importantes para la economía del país y contribuye en promedio en 1.2 al PIB nacional. México es un importante productor y exportador de medicamentos, y cuenta con una amplia variedad de compañías farmacéuticas nacionales e internacionales que operan en el país.
Durante los últimos años, esta industria ha experimentado un fuerte crecimiento gracias a la creciente demanda de medicamentos en el mercado nacional e internacional y se espera que la senda de crecimiento de la industria farmacéutica siga igual para 2022, siendo las exportaciones de los medicamentos mexicanos el motor de la industria farmacéutica.
De hecho, según el informe del INEGI (Instituto Nacional de Estadística y Geografía) “Conociendo la industria farmacéutica”, en 2021 el Producto Interior Bruto correspondiente a la industria y sector farmacéutico aumentó un 8.4% respecto a 2020, un año crucial para el sector por la pandemia de la COVID-19. Además, los puestos de trabajo en el sector farma aumentaron un 3.6% en 2020, respecto a 2019, representando un total de 79.000 empleos.
El país mexicano cuenta con el segundo mayor mercado de Latinoamérica, después de Brasil, que ocupa el primer lugar. La producción de medicamentos realizada en México está acaparada por la fabricación de antibióticos, representando más de la mitad de los medicamentos producidos dentro del país, seguidos de los medicamentos analgésicos y antiparasitarios.
Sin embargo, la industria farmacéutica en México presenta unos desafíos retadores que afectan a su desempeño y desarrollo. Algunos de los desafíos que presenta este sector son:
• Alta competencia: México cuenta con un gran número de compañías y laboratorios farmacéuticos de carácter nacional e internacional que se encuentran compitiendo por tener la cuota de mercado más alta. Además, al ser un sector en el que la diferenciación es realmente complicada, las empresas farmacéuticas tienden a la guerra de precios, llevando a comercializar medicamentos con unos precios más económicos frenando el crecimiento económico de las compañías.
• La regulación del mercado farmacéutico: ya sabemos que el sector sanitario, farmacéutico y healthcare puede llegar a ser realmente complejo por sus diferentes regulaciones y normativas. Esta complejidad puede derivar en la ralentización de medicamentos realmente innovadores dificultando el acceso a los ciudadanos a medicamentos de calidad y más efectivos.
• Falta de acceso a medicamentos: a pesar del crecimiento de la industria farmacéutica en México, todavía existe un gran número de personas que no cuentan con acceso a los medicamentos de calidad. Esto puede deberse a dificultades en el sistema de salud mexicano, falta de recursos financieros o falta de educación sanitaria de los usuarios.
• Piratería de medicamentos: la piratería de medicamentos es un problema en alza en México. Cuando hablamos de la piratería de medicamentos hablamos de la comercialización ilegal de medicamentos falsificados o sin autorización, poniendo en riesgo la salud de la población.
Pero en el sector farmacéutico no sólo existen riesgos, también existen oportunidades capaces de hacer crecer el sector a niveles nunca vistos. Entre las oportunidades del sector encontramos las siguientes:
• Bajo costo de producción de los medicamentos: la posición geográfica de México juega un papel clave dentro de esta oportunidad. La producción de los medicamentos mexicanos supone un coste 17.1% menor en comparación con su país vecino, Estado Unidos y el país con costos de producción más bajos entre los países miembros de la OCDE, siendo una gran oportunidad para el crecimiento del sector a nivel mundial.
• Reto demográfico: según la pirámide generacional mexicana, se augura que casi una quinta parte de sus ciudadanos tenga más de 60 años, suponiendo un riesgo para el sistema sanitario mexicano por la presión sanitaria que pueda llegar a existir. ¿Cómo hacer frente a esta situación? mejores servicios de distribución y accesibilidad a los medicamentos, creando un entorno favorable para el crecimiento del mercado farmacéutico en un largo plazo.
Las tendencias del sector farmacéutico pasan, en primer lugar, por el crecimiento del gasto público y privado sanitario por parte de los consumidores de medicamentos. El gobierno mexicano gasta de carácter anual 500 dólares por cada ciudadano mexicano dentro del sector salud, creando un entorno que propicia el crecimiento de la industria.
En segundo lugar, una de las tendencias en alza combinada con uno de los retos y desafíos que presenta el sector farmacéutico es la mayor accesibilidad de los productos farmacéuticos. Alrededor del 80% de la población del país tiene acceso continuado a los medicamentos y tratamientos necesarios para asegurar su salud y bienestar. Uno de los mayores logros conseguidos en el país, no sólo ha sido la accesibilidad, sino la aceptación de los medicamentos y su consiguiente utilización, asegurando a los pacientes una mejor calidad de vida y mejores estados de salud que impulsan el mercado y sector farmacéutico.
Por último, una de las tendencias ganadoras que encontramos en la industria farmacéutica mexicana es la que tiene en cuenta el Tratado de Libre Comercio Mexicano: un acuerdo comercial firmado con doce países entre los que encontramos a países como Canadá, Japón o Israel, suponiendo un factor clave para el desarrollo de la industria, ampliando las oportunidades de la misma y las empresas que la conforman.
En México, existen múltiples laboratorios internacionales que desarrollan su actividad en el país tales como Pfizer, Merck, Boehringer Ingelheim, Bayer, Astrazeneca. Estos son solo algunos ejemplos de los muchos laboratorios internacionales que operan en México. Hay muchas otras empresas y organizaciones internacionales que tienen instalaciones de investigación y desarrollo en el país y que contribuyen al desarrollo científico y tecnológico en la región. Además, existen otros grandes laboratorios mexicanos que también son referencia dentro del sector como el laboratorio Silanes, Medix, Carnot, Stendhal, Liomont, Sanfer, Pisa y Mavi.
En ambos casos, sean laboratorios nacionales mexicanos o internacionales de otros países, los laboratorios se agrupan en asociaciones como Amiif (La Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica) y Amelaf (Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos). Este tipo de organismos agrupan a más de 100 empresas nacionales o internacionales, con presencia local y/o global y en resumen, a organizaciones que transforman la vida de la sociedad, cuidan y mejoran la salud de los pacientes.
La industria farmacéutica en México ha tenido un crecimiento sólido en los últimos años y se espera un continuo crecimiento en el futuro. Esta industria es esencial y clave para el país, no sólo porque contribuye a garantizar el bienestar de la población y la sociedad mexicana en términos de accesibilidad a los productos sanitarios y farmacéuticos, sino por como hemos explicado, por su enorme impacto económico y financiero en México.