Todos los años, el 10 de septiembre celebramos el Día Mundial para la Prevención del Suicidio. El suicidio es un problema creciente y las cifras cuentan una historia impactante. Cada 40 segundos alguien se quita la vida según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Eso es alrededor de 800 mil personas en todo el mundo cada año, aunque algunas estimaciones acercan ese número a 1 millón. El suicidio es la principal causa de muerte entre las personas de 15 a 29 años y por cada suicidio que resulta en la muerte, hay hasta 40 intentos de suicidio. Lo que sabemos con certeza es que hay mucho por lo que vivir.
El tema definido para la conmemoración del Día Mundial para la Prevención del Suicidio este 2022 tiene que ver con "Crear esperanza a través de la acción". Es decir, el trabajar junto con la familia, amigos, trabajadores de la salud, líderes religiosos y políticos para prevenir el suicidio a través del asesoramiento y los apoyos activos, buscando empoderar a las personas para que estén a cargo de sus vidas y valoren las cosas positivas.
La Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio (AISP) estableció en 2023 el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, que está copatrocinado por la Federación Mundial para la Salud Mental y la Organización Mundial de la Salud. El objetivo del día es investigar y recopilar datos sobre el comportamiento suicida, determinar las diversas causas y por qué sus señales pasan desapercibidas, así como desarrollar prácticas y políticas sólidas para su prevención.
Entre los eventos y actividades del Día Mundial para la Prevención del Suicidio se incluyen conferencias, seminarios y foros de discusión que buscan trabajar para formular nuevas políticas de prevención e intentar definir estrategias para utilizar los medios de comunicación como herramienta para promover la conciencia, organizar ceremonias conmemorativas para recordar a aquellos que perdieron la batalla contra la enfermedad mental, educar a los adolescentes sobre el suicidio así como orientar a quién se puede acudir si es necesario, establecer grupos de apoyo y centros de instalaciones especiales como recursos para la concientización y el tratamiento de la depresión y el suicidio.