El primer viernes de octubre (Este año el 8 de octubre) es el Día Mundial de la Sonrisa, una festividad relativamente nueva con una historia fascinante. Creado por un artista comercial llamado Harvey Ball, este día surgió como respuesta a su creación de la carita sonriente.
A Harvey le preocupaba que la comercialización del símbolo redujera su impacto. Difícilmente podemos culparlo por su estimación; el símbolo se ha utilizado de muchas formas diferentes, como ropa, cómics, tazas de café, alfileres y más. Estas caritas amarillas son más que un simple símbolo, son una declaración sobre el poder de sonreír.
En 1963, Harvey Ball, un artista gráfico y publicista de Worcester, Massachusetts, creó el símbolo de la cara sonriente que todos conocemos. La popularidad de este símbolo explotó en el mundo de la cultura popular. Es el sueño de todo artista que su trabajo sea respetado y recreado, y pocos símbolos han tenido el legado que ha tenido la creación de Harvey.
A lo largo de los años, la carita sonriente se ha convertido en uno de los símbolos más conocidos del mundo. Ha aparecido en películas como "Forrest Gump" y se ha utilizado como motivo en la novela gráfica "Watchmen". Es tan conocido que con solo decir "cara sonriente", apostamos a que puedes verlo en tu mente. Ese círculo amarillo reconocible con puntos negros para los ojos y una curva simple para una sonrisa genuina y pura.
Sin embargo, la carita sonriente original tenía una sonrisa más alargada, un poco más dibujada a mano en estética, ocupando más espacio en la cara del que vemos en las recreaciones modernas. Debido a su uso excesivo, comenzó a alejarse de su intención de buena voluntad y buen humor y supo que había que hacer algo.
En 1999, el Día Mundial de la Sonrisa se convirtió en feriado oficial para recuperar el control. Los aspectos de celebración del día fueron simples pero efectivos: la gente debía usar el día para sonreír y hacer pequeños actos de bondad en todo el mundo. Harvey quería mantener la sonrisa conectada con el ser humano. Al hacerlo, sonreiría y, a cambio, haría sonreír a otra persona y alegraría su día.
Todos pueden marcar la diferencia en el Día Mundial de la Sonrisa con solo ser cariñosos y compasivos y ayudar a quienes los rodean a tener el mejor día posible. Aquellos que sean realmente ambiciosos pueden visitar el sitio web del Día Mundial de la Sonrisa y buscar convertirse en embajador del Día Mundial de la Sonrisa.
Hay varias cosas diferentes que puede hacer en el Día Mundial de la Sonrisa para marcar la diferencia. Hay muchas sugerencias excelentes en línea. Esto incluye entregar certificados de sonrisa a las personas, enviar tarjetas de sonrisa, dar comidas a las personas sin hogar, eventos hospitalarios, visitas a hogares de ancianos, lanzamientos de globos con mensajes del Día Mundial de la Sonrisa, ¡y mucho más! Puede hacer cosas que hagan sonreír a sus seres queridos, así como a la comunidad en general. Tampoco siempre tiene que ser algo grande y grandioso. Hay muchas cosas pequeñas que todos podemos hacer para que las personas se sientan más felices.